Cuando una serie que llevas años siguiendo se marcha, te deja un vacío en el corazón, sobretodo si ha sido de tus favoritas y has vivido con intensidad todas las aventuras que han vividos sus personajes. Aunque ya ha pasado un mes, no me olvido de Fringe, quien se despidió con su quinta temporada a mediados de enero. Aunque yo la empezara un poco más tarde, han sido varios años siguiendo las aventuras de Liv, Walt y Pete, las cuales no se van a olvidar. Estas líneas van por ella.